Da Abc del 16/05/2006
Originale su http://www.abc.es/abc/pg060516/prensa/noticias/Internacional/Europa/20...
Giorgio Napolitano exhorta a los partidos a evitar «la exasperación y la mezquindad» políticas
Hoy inicia las consultas previstas por la Constitución y mañana encargará a Prodi la formación del nuevo Gobierno, que presentará el jueves en el Palacio del Quirinal
di Juan Vicente
ROMA. El nuevo presidente de la República Italiana, Giorgio Napolitano, tomó ayer posesión del cargo invitando a los partidos políticos a evitar «la exasperación y la mezquindad» que han sumido el país en un clima de crispación durante la campaña electoral. Silvio Berlusconi no se dio por aludido, pues fue el único parlamentario entre casi un millar que no se sumó a los 31 aplausos que jalonaron el discurso.
En su exhaustiva alocución al Parlamento italiano, Napolitano lamentó «el clima de pura contraposición y de incomunicación» que impide «buscar terrenos de esfuerzo común» entre las coaliciones que lideran Romano Prodi y Silvio Berlusconi.
Napolitano acelerará las numerosas consultas previstas por la Constitución italiana antes de encargar la formación de Gobierno. Las iniciará esta mañana recibiendo al presidente del Senado, Franco Marini. Seguirá con los jefes de las demás instituciones y partidos y las concluirá esta tarde recibiendo al último de sus predecesores en el cargo, Carlo Azeglio Ciampi.
El presidente Napolitano encargará mañana a Romano Prodi formar un nuevo Ejecutivo, que el ganador de las elecciones generales del pasado abril presentará el jueves en el Quirinal, con vistas a la investidura en el Senado el viernes, y en la Cámara de Diputados el próximo lunes. En su discurso al Parlamento y a la nación, el nuevo presidente de la República insistió en que no representará sólo a quienes le han elegido -la mayoría del centro-izquierda- sino a todos los partidos e instituciones, en un plano de igualdad e imparcialidad.
DISCURSO MODERADO
Aunque un discurso como el de ayer debe ajustarse a poco más que prometer respeto a la Constitución y llamar a todos los italianos a la unidad, Giorgio Napolitano adelantó algunas directrices interesantes, como la de prestar más atención a la economía, pero no de modo proteccionista: el Estado debe «favorecer la competitividad del sistema sin protecciones indebidas».
Sin citar, naturalmente, ni a Silvio Berlusconi, ni a otros parlamentarios bajo diversos procesos, el presidente de la República invitó a rebajar la tensión entre la Justicia y la política, pidiendo «serenidad y equilibrio» en el cumplimiento de las respectivas tareas. Napolitano agradeció el servicio de las fuerzas de seguridad y manifestó que es necesario afrontar la amenaza del terrorismo islamista «sin vacilación».
En su exhaustiva alocución al Parlamento italiano, Napolitano lamentó «el clima de pura contraposición y de incomunicación» que impide «buscar terrenos de esfuerzo común» entre las coaliciones que lideran Romano Prodi y Silvio Berlusconi.
Napolitano acelerará las numerosas consultas previstas por la Constitución italiana antes de encargar la formación de Gobierno. Las iniciará esta mañana recibiendo al presidente del Senado, Franco Marini. Seguirá con los jefes de las demás instituciones y partidos y las concluirá esta tarde recibiendo al último de sus predecesores en el cargo, Carlo Azeglio Ciampi.
El presidente Napolitano encargará mañana a Romano Prodi formar un nuevo Ejecutivo, que el ganador de las elecciones generales del pasado abril presentará el jueves en el Quirinal, con vistas a la investidura en el Senado el viernes, y en la Cámara de Diputados el próximo lunes. En su discurso al Parlamento y a la nación, el nuevo presidente de la República insistió en que no representará sólo a quienes le han elegido -la mayoría del centro-izquierda- sino a todos los partidos e instituciones, en un plano de igualdad e imparcialidad.
DISCURSO MODERADO
Aunque un discurso como el de ayer debe ajustarse a poco más que prometer respeto a la Constitución y llamar a todos los italianos a la unidad, Giorgio Napolitano adelantó algunas directrices interesantes, como la de prestar más atención a la economía, pero no de modo proteccionista: el Estado debe «favorecer la competitividad del sistema sin protecciones indebidas».
Sin citar, naturalmente, ni a Silvio Berlusconi, ni a otros parlamentarios bajo diversos procesos, el presidente de la República invitó a rebajar la tensión entre la Justicia y la política, pidiendo «serenidad y equilibrio» en el cumplimiento de las respectivas tareas. Napolitano agradeció el servicio de las fuerzas de seguridad y manifestó que es necesario afrontar la amenaza del terrorismo islamista «sin vacilación».
Sullo stesso argomento
Articoli in archivio
di Peter Popham su The Indipendent del 31/10/2006
di Tony Barber su Financial Times del 30/10/2006
News in archivio
su Punto Informatico del 18/04/2006
In biblioteca
di AA.VV.
Reality Book, 2006
Reality Book, 2006
di AA.VV.
Il Mulino, 2006
Il Mulino, 2006
di AA.VV.
Contemporanea Editore, 2006
Contemporanea Editore, 2006